Columna migración e identidad 


Latinoamérica está constituida por varios países, cada uno con costumbres, culturas, creencias y problemas. Venezuela, el país que un día fue de los más ricos de la región, en la actualidad su moneda se devalúa constantemente. La población migra en búsqueda de un mejor futuro; y oportunidades que en su país de origen son escasos. Juan Carlos, un joven de 23 años decidió partir de su hogar e irse a Chile, su objetivo era trabajar para ganar dinero y enviárselo a su familia en forma de remesa. Con frecuencia, soñaba el poder llevarlos junto a él, sin embargo, el frío de la noche obscura derrumbaba sus esperanzas. Desde que partió no dejó de caminar. Tomó un bus y divisó por la ventana a una familia feliz, sin preocupaciones, recordó con nostalgia a sus cuatro hermanos, mientras lloraba la pérdida reciente de su padre a causa de la discriminación que aumenta cada día. Su figura empezó a decaer, cada vez los huesos del cuerpo eran más visibles, después de la segunda semana de travesía empezó a comer una vez al día. El miedo acechaba por todos lados esperando a su víctima. La desesperanza comenzó a corroer la mente del individuo hasta llevarlo a un estado de locura y desdicha. Cada migrante tiene una situación diferente, sin embargo comparten la complejidad de ser aceptado en su entorno. La discriminación es un problema social, el miedo que presenta la gente ante lo desconocido lleva al ataque y prejuicios. Además su identidad se ve afectada por los contrastes culturales y la inclusión invasiva.


Desconstrucción de la identidad humana
Por: David Condor

Desde la antigüedad, el ser humano ha buscado diferenciarse respecto de los demás, de esta forma nacen las culturas y empiezan a desarrollarse. Conforme van creciendo generan una identidad colectiva en la cual se comparten gustos, creencias y saberes. Los seres humanos son una composición de varios caracteres y experiencias que se adquieren a través de los años, las características generalmente están dadas por el entorno de desarrollo. Todos estos componentes se los puede catalogar como una identidad, sin embargo, existen distintos tipos como la identidad cultural, nacional, política, religiosa, colectiva y personal. El ser humano está en constante cambio y tiene la capacidad de adaptarse según la ocasión lo requiera, así mismo no puede tener un pensamiento parcial acerca de una opinión, está singularidad conforma la identidad. De este modo, se puede analizar que este concepto es una cualidad intrínseca del ser humano, nunca va a ser removida debido a que la sociedad y la naturaleza se encargan de ofrecer una en caso de pérdida.

Cada individuo se desarrolla conforme a una cultura, sociedad o identidad colectiva, es decir que su construcción estará condicionada según el entorno de crianza. Las marcas de que deja la vida en una persona se convierten en aprendizajes, los cuales moldean el carácter y personalidad, sin embargo existe un punto en la existencia de cada hombre, donde el paso del tiempo causa que su forma de ser sea inmutable. Carolina de la Torres en el libro “Las identidades Una mirada des la psicología” plantea que:

“Cuando se habla de la identidad de un sujeto individual o colectivo hacemos referencia a procesos que nos permiten asumir que ese sujeto, en determinado momento y contexto, es y tiene conciencia de ser él mismo, y que esa conciencia de sí se expresa”( De la Torre Molina, C. (2001).)

De la misma forma el individuo es capaz de diferenciarse de otros, e identificarse con otros según las similitudes que comparten, así mismo generan un sentido de pertenecía hacia un grupo en particular. Es parte innata del ser humanos pertenecer a la unión de individuos para formar un conjunto, esto propone que el individuo se sienta seguro y protegido en un grupo de cualidades compartidas.

El hombre es un animal social, es decir que puede coexistir junto a otras figuras de su misma especie, pero al igual que todos los animales, tiene rasgos primitivos propios de sí mismo. Las hembras dentro del grupo de mamíferos son seres empáticos y amorosos hacia sus crías, así mismo las madres comparten esta característica intrínseca que forma parte de su identidad. Además en el caso hipotético de que una persona llegue a perder su memoria debido a cualquier tipo de accidente, su comportamiento se apegara hacia un lado instintivo y natural. De esta forma se evidencia que la identidad no puede ser removida del sujeto, aunque puede cambiar para seguir el principio de Charles Darwin. Donde el individuo debe adaptarse para sobrevivir o en este caso desarrollar un estilo de vida más cómodo, en caso contrario su identidad se verá afectada por el flujo cambiante de la sociedad. Luego de lo expuesto surge la duda de, ¿Cómo afectan las enfermedades mentales al desarrollo de la identidad sobre los seres humanos?

La Jaula Llamada Realidad
Por: Martín Cortez

Las hermanas Wachowski en su película “Matrix” presentan al espectador una realidad falsa del mismo nombre. Donde las personas son controladas por máquinas y el mundo que conocen es una simple codificación de números en una computadora que se ven reflejados como objetos o incluso en personas. El protagonista Neo emprende un viaje con el fin de buscar la verdad, tanto de su mundo, como el de su existencia. El intérprete afirma no creer en el destino puesto que no le gusta la idea de no controlar su vida, a pesar de ser llamado “el elegido” duda en cada decisión que toma. Durante el film se ha presentado dos senderos definidos, simples elecciones de sí y no, pero él no se ve satisfecho por esto, llegando a tomar los caminos más difíciles para hallar el significado de ese algo que tanto busca. La elección más grande que debe tomar se reduce a dos pastillas, con la azul despierta en su cama como si fuese todo un sueño y la roja donde ve el verdadero mundo que lo rodea. Su elección es clara, toma la segunda cápsula con el fin de despertar de ese mundo ficticio que lo tiene atrapado desde el inicio de su vida.

El crecimiento personal que tiene el protagonista a partir de ser reclutado por la resistencia es a pasos agigantados, ya no es el mismo de antes y aunque no le guste, ya no puede regresar. Sus elecciones son lo que han forjado su destino y personalidad, el conocer al grupo y el saber que todos esos momentos vividos en “la tierra” eran falsos lo impactan. A pesar de esto no se detiene, toda su existencia es reducida a simples señales eléctricas que llegan a su cerebro, pero para varios este era el precio que debían pagar por saber la verdad. No todas las personas la pueden soportar y aquellos que lo logran realizarán un verdadero cambio. Al inicio el protagonista no lo acepta puesto que toda su vida ha sido un esclavo de las máquinas, es débil y escéptico con todo lo que pasa a su alrededor. Está claro que no todos podrían enfrentar esta verdad, pero toma la decisión de cambiar y volverse más fuerte para colocar el camino del futuro a su favor y así poder liberar la mente de miles de personas de esa jaula que solo unos pocos pueden ver. El poder elegir el camino que se quiere recorrer por sí mismo es lo que diferencia unas personas de las otras, sin esto todo sería igual, no existirían los gustos o preferencias ni siquiera el arte puesto que nadie se expresaría.

En la actualidad la matrix no se aleja de la realidad, las personas viven controladas por una élite que existe a costa de ello, sin que tengan ni la más mínima idea. Se los educa como si se tratasen de animales, sin pensamiento ni criterio propio, donde se busca controlar al rebaño y evitar su desarrollo. Esta barrera afecta al progreso de una identidad única, si no se tiene elección propia no se puede generar un desarrollo personal. El hombre se convierte en un ente que vaga en un sistema diseñado para crear al humano “ideal”, sin destacar el uno del otro, como si fuesen marionetas producidas en la misma fábrica. Si las personas no tuvieran la capacidad de elegir que quieran ver o seguir por sí mismas, no se puede hablar de una identidad propia. Solo se produciría un estado artificial de pertenencia donde nadie es consciente de lo que pasa en realidad a su alrededor. Pocos serían aquellos quienes alzan la cabeza y miran que son parte de algo más grande y que aquellos que los observan desde arriba los toman como simples peones. Por consiguiente, ¿la realidad se limita a lo que se puede apreciar o va más allá de lo que la vista permite comprender? Y si es así, ¿Quiénes son los entes que controlan la dirección de esa realidad?

La antipóda construcción del ser continental latinoamericano
Por: Mario Cadena

A pesar de la gran variedad de ejemplos de identidad, tanto individual como colectiva, existen diversos factores que dificultan o imposibilitan su desarrollo. En el caso de las identidades individuales, dichas causas se resumen a conflictos intrapersonales y ontológicos relacionados a la inseguridad, sensibilidad e ignorancia. Por el contrario, las identidades de carácter colectivo son obstaculizadas por circunstancias más complejas, como por ejemplo, la disputa entre corrientes ideológicas predominantes, exclusión, xenofobia, eventos históricos pasados, etc. Dando como resultado, que sea imposible formar nuevas alianzas, obligando a las personas a vivir en la resignación, y en peores casos en el odio. Entonces, considerando las consecuencias de ser o no ser parte del constructo de una identidad social, ¿Por qué simplemente no ignorar la idea de forjar una identidad colectiva? ¿Realmente es de vital importancia ser parte de una? Las respuestas a estas dudas se ven reflejadas en el texto del escritor Victor H. Ramos, titulado ¿Existe una identidad latinoamericana? Mitos, realidades y la versátil persistencia de nuestro ser continental: “… aportar su singularidad al mundo es un acto vital para participar de él creando, para defender su espacio de libertad de las tendencias dominadoras y para posibilitar el diálogo y la cooperación con otras identidades compartiendo lo nuestro y recibiendo lo ajeno”, implícitamente, Ramos expone que el desarrollar una identidad cultural y competir contra el “otro”, es parte de una necesidad de la naturaleza humana misma, por este hecho es irremplazable y no puede ser ignorada. Así pues, Latinoamérica es un continente insatisfecho de una identidad colectiva en la actualidad, a causa de su contexto social, histórico y económico.

Pero, ¿Por qué el ser humano simplemente no se rinde? ¿En realidad es tan importante forjar una identidad social? La respuesta a estas dudas se reflejan en la obra del escritor Victor H. Ramos, en su obra “¿Existe una identidad latinoamericana? Mitos, realidades y la versátil persistencia de nuestro ser continental”: “

La identidad latinoamericana, según el escritor Antonio Ureña García, es una utopía inexistente en la actualidad a causa de los conflictos ideológicos entre los países latinos, ya sea por la gran diversidad de culturas, intereses e idiomas, o la diferencia de intereses económicos y políticos, además del predominio de corrientes de pensamiento nacionalistas, patriotistas o incluso chauvinistas. En realidad, estas no son las únicas dificultades que afronta la identidad latina, no simplemente se resumen a causas ideológicas, sino demográficas e históricas. Desde la época de la Colonia española durante el siglo XVI, las Américas se desarrollaron de manera homogénea a causa de fenómenos biológicos sanguíneos como el mestizaje, conquistas europeas de territorios latinos, etc. Lo que ha resultado en una gran variedad de diversidades, así pues, dando lugar al reto de unificar civilizaciones y culturas altamente diferentes.

Sin embargo, la construcción de las identidades latinoamericanas parte desde la actualidad como un plan identitario continental que es constructor de su constante dicotomía de elementos contrarios y comunes. Esto se debe a que las Américas sufrieron el mismo proceso histórico de colonización e independencia. Asimismo, en el presente, los países de América Latina son parte de un sistema globalizado ideológico y económico. Por lo que, la existencia de estos fenómenos comunes y contrarios, como la diversidad de culturas, intereses y lenguas, serán la razón de unión, que acabe con las ideologías predominantes nacionalistas que impiden la formación de la identidad de los latinos. Esta frase resulta un tanto utópica, motivo por el cual permite dudar, ¿La identidad latinoamericana se fundamentará en las bases de los elementos contrarios y comunes, o se darán otros eventos que acelerarán el proceso identitario latino?

Anhelo de oportunidades
Por: Mateo Curipallo

La migración es el cambio de residencia que un individuo realiza bajo ciertos factores políticos, sociales o económicos. Este fenómeno ha existido desde la antigüedad, fue hace aproximadamente 200.000 mil años atrás que el ser humano empezó a establecerse en distintas partes del mundo. Actualmente la tasa de migrantes es muy alta en comparación a otras épocas, esto se debe, ya que en algunos países no se cuenta con las suficientes ofertas de trabajo, obligándoles a buscar mejores oportunidades. Además, existen otras causas por las que una persona decide migrar, sin embargo, no todos tienen la capacidad de adaptarse fácilmente a un nuevo entorno. Las condiciones descritas constituyen a un amplio movimiento que arroja a las personas a una situación de vulnerabilidad en un ambiente totalmente desconocido.

El fenómeno migratorio se genera en parte debido a una búsqueda de nuevos sueños y oportunidades. Guilén, et al (2019) sostienen que: “Una diversidad de acontecimientos económicos, sociales, políticos, otros, aunque puedan ser muy mínimos, y otros emblemáticos más rigurosos hasta crueles, han constituido la columna vertebral de los cimientos de la migración” Al atravesar una frontera, el migrante se enfrenta con normas que privan de cierto modo sus derechos. Estos significan una gran limitante para las personas, ya que muchos deciden irse por temas culturales o también económicos. Cabe mencionar que estos solo son algunos de los motivos que determinan si una persona migra o no. Hoy en día la tasa de migrantes ha crecido exponencialmente debido a la situación que la humanidad está pasando en estos últimos años. A pesar de los conflictos que existen, la migración también brinda y mejora la calidad de vida de muchas personas, el trabajo por ejemplo puede resultar muy positivo en otro país gracias a los avances tecnológicos de aquel lugar, es por ello que esto va sujeto a la perspectiva de cada individuo.

En la actualidad ya son más de 231 millones de migrantes alrededor del mundo y la mayoría siempre busca de alguna manera satisfacer sus necesidades, ya sean económicas, políticas, culturales o sociales. No obstante, los movimientos también pueden producirse en circunstancias favorables, sin embargo no siempre es así. En los últimos años, se ha registrado un aumento de las migraciones y desplazamientos provocados por varios conflictos, siendo una de ellas la falta de oportunidades y seguridad humana. Los factores que limitan a la gente para que pueda llegar a tener éxito en otro país depende de varias cosas,una de ellas es el lenguaje y la experiencia laboral que una persona necesita al momento de solicitar empleo. Además no todos son aceptados por la sociedad y son discriminados hasta el punto de privar sus derechos, como por ejemplo al de una vivienda digna o tener las mismas oportunidades que el resto, en pocas palabras ser iguales dentro de un lugar distinto al país de origen es algo casi imposible. Un cambio de residencia no siempre implica una migración, sin embargo ¿será que en algún momento la humanidad perderá la necesidad de migrar?

La Adaptabilidad como Herramienta Fundamental del Inmigrante
Por: Alexis Trujillo

La identidad es la base fundamental de la interacción humana, ya que, a través de características compartidas se genera empatía. Además, las cualidades diferenciadoras de los individuos permiten el establecimiento de límites entre lo que aprueban y lo que no les causa rechazo. En el filme “Ya no estoy aquí” Ulises, el personaje principal, es obligado a desplazarse a Estados Unidos a causa de la violencia estructural que experimentaba en México. En esta travesía experimentó dificultades a nivel cultural, como la imposibilidad de conseguir trabajos debido a su nulo dominio del inglés; y a nivel psicológico, dado que vivió múltiples situaciones desagradables que provocaron la sustitución de su identidad. La migración además de estar impregnada con incertidumbre y acarrear problemas económicos, también pone a prueba la capacidad de adaptabilidad del individuo.

El progreso de un grupo de personas está condicionado por sus interacciones, mientras más lazos existan entre ellos, estarán más dispuestos a colaborar. Cuando un extranjero se introduce a un grupo su inclusión atraviesa dos obstáculos, la falta de conexión con los nativos y la actitud reacia hacia lo desconocido que se presentan naturalmente en cualquier ser humano. Un inmigrante para poder integrarse a una nueva sociedad tiene que moldearse a las características de la misma. No obstante, surge la dicotomía entre adaptarse para sobrevivir y perder todos sus rasgos identitarios; o mantenerse firme a la totalidad de sus creencias y naufragar en su nuevo contexto. Hay que aclarar que la identidad es generada mediante el autoconocimiento y la interacción con el entorno. Los componentes diferenciadores son fundamentales, sin embargo, las características compartidas también son necesarias para que un individuo pueda desarrollarse en una sociedad. Por consiguiente, la ecuanimidad entre estos factores es esencial con el objetivo de que la persona sea capaz de interactuar con el ambiente social y no deje de lado los intereses propios. En la película, es retratado el escenario que se produce cuando no se consigue dicho equilibrio. El protagonista, durante su estadía por el país extranjero, decidió no variar ni un poco su personalidad y pretendía encajar en su nuevo ambiente con las costumbres del anterior. Esto dio como resultado que, además de que no pudo encajar, experimentara una lucha interna que lo convirtió en un fantasma emocional; dejando de lado su personalidad debido a todas las situaciones desagradables que presenció y sin poder adaptarse a las circunstancias.

La migración es un proceso que la mayoría de las veces resulta incómodo en muchos aspectos, desde la ruptura de relaciones sociales preexistentes hasta buscar un trabajo para sobrevivir. Para que esta situación sea favorable, debe ocurrir una aceptación por parte de la comunidad y una adecuación por parte del individuo extranjero. Cabe recalcar que, si bien la adaptabilidad es una cualidad muy útil, no se debe descartar la búsqueda de un punto medio donde el encajar en determinado entorno no signifique la pérdida de la individualidad. Además, es necesario que el desarrollo en el que se adquiere nuevas características sea orgánico, de esta manera se consigue que estas cualidades no sean una cáscara si no que se conviertan en parte de la personalidad. En una tormenta, el roble rígido no logra resistir y termina pereciendo, sin embargo, el bambú flexible se adapta a la corriente y perdura. No obstante, surge la duda: ¿Qué ocurre cuando un individuo no realiza una introspección y su identidad está compuesta únicamente por características superficiales?

Conclusión: 

La identidad es propia del ser humano, por lo que, siempre estará presente ya sea forjada de forma innata o a través de las relaciones sociales; cabe recalcar que, el hombre de forma natural se adapta al entorno para sobrevivir y encajar dentro del mismo. El camino de cada individuo está dado por las decisiones que toma, no obstante, al verse condicionadas por agentes externos es manipulado de forma involuntaria, alterando su desarrollo personal. Así pués, en el continente latinoamericano a causa de un trasfondo ideológico, geográfico e histórico; las personas de esta región enfrentan dificultades estructurales que frenan su progreso. Por ejemplo, la migración está sujeta a diversos cambios que pueden ser económicos, políticos o sociales. La gente busca satisfacer sus necesidades básicas mediante nuevas oportunidades, sin embargo, el problema surge cuando existe algún tipo de discriminación hacia las creencia o rasgos de la persona. De esta manera, el extranjero experimenta una dicotomía entre perder su identidad y poder encajar; o mantener intacta sus creencias y zozobrar en su nuevo entorno.

Bibliografía:

DE LA TORRE, Carolina, 2001, Las identidades, una mirada desde la psicología, La Habana: Centro de Investigación y Desarrollo de la cultura cubana Juan http://biblioteca.clacso.edu.ar/clacso/se/20191016040645/Las_identidades.pdf


Moro Da Dalt, L., Cedrón Martinho, I., & Carrasco Torres, T. (2009). Guía para la promoción personal de las mujeres gitanas: Perspectiva psico-emocional y desarrollo profesional. La identidad, 47(1), 17–31. https://www.gitanos.org/publicaciones/guiapromocionmujeres/pdf/completo.pdf


Guillén. (08 Marzo 2020). Migración: Contexto, impacto y desafío. Una reflexión teórica. Univsidad del Zulida, 283.

Antonio Ureña García. (24 de Julio de 2014). Identidad Latinoamericana como Utopía. PanoramaCultural.com. https://panoramacultural.com.co/pueblos/2401/la-identidad-latinoamericana-como-utopia

Victor H. Ramos. (2003). ¿Existe una identidad latinoamericana? Mitos, realidades y la versátil persistencia de nuestro ser continental. Utopía y Praxis Latinoamericana. https://www.redalyc.org/pdf/279/27902109.pdf